Teniendo en cuenta los últimos acontecimientos sobre los lotes de atún enlatado de una de las marcas más reconocidas en el país, con resultados no conforme en los límites permitidos de metales contaminantes en el atún para consumo humano y ante el riesgo para la salud humana que representa la falta de regulación del uso del mercurio en el país, y que puede afectar algunos productos de la canasta familiar, ocasionando graves problemas para la salud humana, tales como, retardo mental y deformaciones, entre otras, el Congresista del Partido Político MIRA, Carlos Eduardo Guevara, solicitó al Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos, INVIMA, explicar qué clase de controles se realizan a los alimentos que son vendidos en el país.
Asimismo, pidió al Congreso de la República tramitar con mensaje de urgencia el proyecto que regula el uso del mercurio en el país y que hace referencia a la ratificación del Convenio de Minamata, de igual manera, el que le pone control a la minería ilegal, por la afectación que tiene para la salud el uso indiscriminado del mercurio.
“Solicitamos al Gobierno Nacional que en el proyecto que cursa en el Congreso de la República sobre minería ilegal, se contemple un período de transición para que los pequeños mineros puedan formalizar su actividad”, afirmó.
Minería ilegal está acabando con el Chocó
Asimismo, este fin de semana en recorrido de exploración por los ríos Atrato y Quito del Chocó, se pudo evidenciar de manera más clara la problemática, en la que: “El impacto ambiental sobre el río Quito en el Chocó ha generado un daño no solo ambiental sino social. El uso indiscriminado de mercurio ha hecho que miles de habitantes en este departamento no puedan consumir pescado, que es su principal fuente de alimentación”, manifestó el Congresista de MIRA.
El Representante Guevara explicó que para producir 1 gramo de oro se requieren 2.4 gramos de mercurio que van directamente a los afluentes, en el caso del Chocó para producir 1 gramos de oro se requiere entre 5 y 10 gramos de mercurio, y todo esto va a parar a las fuentes hídricas, contaminado el agua, los peces, las personas y los municipios que utilizan estos ríos como abastecimiento de agua.
Asimismo, de los 4 millones de hectáreas que posee el Chocó, 302.381, son destinadas a la explotación minera, en la que los impactos ambientales que se derivan de esta explotación pueden llegar a la deforestación anual de 4 hectáreas por título minero. Adicionalmente, causa preocupación que cada título minero genera cerca de 3.100 toneladas de residuos al año y se utilizan 339 galones de aceite que son vertidos a los ríos o afluentes.
El fin de semana una delegación del Congreso de la República, acudió al recorrido por el departamento del Chocó, organizado por el Foro Nacional por Colombia y el Fondo Mundial para la Naturaleza, WWF, al cual también asistieron los Senadores Nidia Marcela Osorio y Antonio Navarro Wolf, así como los Representantes Víctor Correa e Inti Asprilla.
“La minería ilegal tiene que ser un delito, es inconcebible que no exista ningún tipo de acción penal para controlar este fenómeno que está deteriorando la salud, la vida humana y nuestros ecosistemas, es indignante que la minería ilegal esté acabando con la selva del Chocó ante los ojos de todas las autoridades“, afirmó el Representante Guevara.