Dos hermanos, esos que se gozaron en su infancia, de principio a fin las vacaciones recreativas que organizaba el Partido Político MIRA, son los mismos que ahora le imprimen ganas a las juventudes miraístas y quienes al ritmo de la música electrónica llevan con armonioso ‘beat’ un mensaje fresco, de responsabilidad y disciplina, que ha sido reconocido hasta por el mismo gobierno nacional, pues son beneficiarios del selecto grupo de los ‘Ser Pilo Paga’.
Nicolás y Javier Téllez, que desde las ‘Chiquitudes’ ingresaron al colectivo, han logrado sus objetivos, dicen ellos, gracias a los valores y principios que le inculcó su señora madre Elizabeth Ortiz y que fueron reafirmados en el miraísmo. “Somos dos jóvenes miraístas que iniciamos desde temprana edad la colaboración dentro del Partido. Vivimos en Bogotá y actualmente tenemos 22 y 20 años”, relató Nicolás, el mayor de este dúo y quien vibra con la música electrónica. Los hermanos Téllez, a quienes algunos los confunden como gemelos o mellizos, son dos jóvenes que alcanzaron el beneficio del programa ‘pilo’ y en la actualidad adelantan estudios en dos prestigiosas universidades del país.
“Nos encontramos estudiando en la Universidad Nacional, mi hermano Nicolás ingeniería industrial, y yo en Los Andes, ingeniería electrónica. Esto lo logramos gracias al programa ‘Ser Pilo Paga’ del que somos beneficiarios, debido a nuestro rendimiento académico, obtenido a partir de la disciplina y dedicación inculcados por nuestra familia, la que se encuentra conformada por nuestra mamá, nuestros abuelos María Gordillo y Luis Ortiz, y nuestro hermano Juan David Alarcón”, manifestó Javier, el menor de estas dos ‘pepas’ y quien disfruta de los acordes de Morat, Andrés Cepeda y otro tanto de la electrónica.
Con la alegría de la juventud evocaron los dos al unísono cuando llegaron al partido y cómo ahora son ellos quienes lideran los procesos de los niños y jóvenes de la colectividad. “A la edad de 12 y 10 años conocimos del partido gracias a las vacaciones recreativas que impartían los jóvenes miraístas. Tiempo después pasamos a ser nosotros quienes apoyábamos dichas labores en el grupo de ‘Chiquitudes’ en el barrio Prado Veraniego, para después ingresar los dos al grupo de Juventudes MIRA Prado, del que hoy Nicolás es coordinador desde hace 3 años”.
En dichos espacios, los hermanos han liderado actividades para apoyar tanto al partido como a la comunidad. “Hemos llevado el miraísmo a los encuentros ciudadanos territoriales y temáticos, la plataforma juvenil de Suba, entre otros espacios de participación ciudadana. Hoy en día, en nuestros centros de educación superior trabajamos en la sociedad ‘Pilo’, las mesas interpartidista y Redes, apoyando diversas causas”, comentó Nicolás, un joven que además de la música vive por el voleibol.
Ellos desde ya, y en las aulas de sus alma máter respectivas, se proyectan para seguir cumpliendo con sus sueños y así apoyar a la comunidad. “En Juventudes MIRA hemos formado más que una amistad con los jóvenes, hemos formado una familia que trabaja unida para lograr los diversos retos que surgen y para adquirir las cualidades que requiere un líder miraísta”, indicó Javier, aficionado al tenis de mesa y quien resaltó: “Reconocemos que es necesario continuar capacitándonos, con el objetivo de tener una preparación académica adecuada para apoyar el trabajo del partido”.
Es por tanto, que con Dios, a quien le reconocen todos sus logros y a quien le agradecen por las oportunidades, trabajan para luego estudiar economía e inteligencia artificial, en el caso de Javier, y Nicolás tiene la idea de profundizar en las áreas de finanzas y la distribución de recursos al interior del país, como por ejemplo, el agua. A su vez, entre los planes de Nicolás está ser, en un mediano plazo, edil de la localidad de Suba y Javier quiere apoyar al colectivo desde la rama académica y difundir el miraísmo en el exterior.
Son los hermanos Téllez, una inspiradora melodía compuesta con irrepetibles consolas y que construyen un ‘track’, el que transporta a quienes los conocen entre interesantes ‘bleep’ y ‘BPM’, ‘Beats Por Minuto’, a una armoniosa pieza, en la que se demuestra que con dedicación, principios y valores se logran grandes cambios. “Para nosotros ser miraísta es tener un conjunto de cualidades y fortalezas que facilitan la solución de problemas del común a través de la política. Dichas cualidades se encuentran fuertemente ligadas a la aplicación de los valores y principios en todo cuanto se realice. Ser miraísta es sinónimo de transparencia, diligencia, lealtad, disciplina, respeto, responsabilidad, emprendimiento, trabajo en equipo y felicidad”, concluyeron.