No obstante que la capital del Valle es una ciudad con alta población Afrodescendiente, la situación de la población afrocolombiana es crítica, y el plan de desarrollo no contempla indicadores que permitan superar las malas condiciones de las comunidades negras en la ciudad.
El Plan de Desarrollo de Cali, diagnóstica el problema pero no plantea soluciones claras, asi lo manifiesta el concejal Juan Carlos Olaya de la bancada del Movimiento Mira. Quien leyó en la plenaria del concejo el diagnóstico: “El cuadro de indicadores de condiciones de vida de la población afrocolombiana frente al resto de la población lo completa una mayor proporción de personas en situación de discapacidad (18.1%); un mayor porcentaje de personas que aguantan hambre (106.7%), un mayor porcentaje de población desplazada sobre la población migrante (34.5%) y, la tasa de pobreza según NBI es 71.6% más alta. Asociado a la mayor vulnerabilidad socio demográfica y peores condiciones de vida, las tasas de analfabetismo son 24.6% más altas, igualmente, las tasas de asistencia escolar son ligeramente más bajas, debido a esto, la participación de la población afrocolombiana en la educación superior apenas llega a 6.0% frente al 13.4% de la población no étnica; es decir la brecha étnico-racial en la educación superior alcanza 124.17%.
La población afrocolombiana frente a la no étnica tiene una menor tasa de cobertura en salud en el régimen contributivo (-23%). Por otra parte, la tasa de cobertura en el régimen subsidiado es (49.1%) más grande para los afro colombianos. Sin embargo, el porcentaje de población afro colombiana sin ningún tipo de afiliación al servicio de salud es mayor (26.3%)”.
Expresó el Concejal Olaya: Al analizar los indicadores no se encuentra ninguno que tienda a impactar con enfoque diferencial esta situación precaria y paupérrima de la población afrodescendiente, y sobre todo lo que tiene que ver con el mínimo vital en dos puntos básicos del diagnóstico, por ejemplo: “un mayor porcentaje de personas que aguantan hambre (106.7%), La tasa de desempleo es 40% más alta para los afro colombianos que para el resto de la población.”
Con un porcentaje de hambre y de desempleo de estos cualquier política de convivencia, de paz de seguridad fracasa.
Se deben tomar medidas efectivas, como por ejemplo incentivos tributarios a empresas que empleen mano de obra afrocolombiana, capacitación en emprendimiento pero con capital semilla, acudir a la cooperación internacional para generar grandes proyectos que impacten la miseria en que se encuentran sumidas estas comunidades.
Naciones Unidas, en el documento titulado “Políticas Públicas Para el Avance de la Población Afro Colombiana” manifiesta:
“Las políticas públicas también deben contener procedimientos para implementar sus metas y, por ello, en sus planes, programas y proyectos deben responder a la pregunta sobre el cómo. Una buena intervención es un buen camino y un buen camino es una garantía para poder llegar a la meta”
Por lo anterior consideramos que es necesario que el Gobierno local responda a las necesidades de las comunidades garantizando la protección de los derechos humanos y los derechos colectivos, por lo que se hace un llamado para que se den soluciones a las necesidades que se evidencian.
Contacto:
JUAN CARLOS OLAYA, CEL. 3165252385