La aspirante al concejo por el municipio de Floridablanca, Blanca Rosa Pabón Cruz, envió un derecho de petición a la Corporación Autónoma para la Defensa de la Meseta de Bucaramanga (CDMB), en el que solicitaba “acciones con el fin de mitigar la problemática de contaminación ambiental sonora” en la zona residencial de Cañaveral.
Un acuerdo firmado entre los representantes de cinco empresas de recreación y la Polícia Nacional, estableció que en adelante las denominadas chivas rumberas deberán moderar el ruido que producen cuando pasen por la zona residencial de Cañaveral; como una respuesta a las quejas presentadas por varios ciudadanos que habían solicitado a las autoridades mayor control en este aspecto.
Mediante un comunicado, la Polícia señaló que el Grupo Protección Ambiental y Ecológica, argumentaba razones de peso donde explicaba el problema que se presentaba en el sector de la carrera 26, debido al ruido que ocacionan las chivas rumberas. Al aplicar la Ley 09 de 1979 del Código Sanitario Nacional donde se reglamenta la calidad del aire, lograron que los representantes legales de cada una de las empresas de transporte recreacional, se comprometiera a moderar el volumen de la música en los vehículos, so pena de recibir alguna sanción. Además del comprómiso adquirido, algunas empresas transportadoras, solicitaron a La Corporación Autónoma para la Defensa de la Meseta de Bucaramanga, que los capacite sobre el buen uso del volumen máximo permitido y como medirlo.
A través del derecho de petición se recogieron más de 300 firmas de los residentes de conjuntos como Buganvilia, Parque Central, Belhorizonte y Altos de Cañaveral II. El acuerdo fue firmado desde abril y hasta el momento las empresas han cumplido su compromiso.