El Senador del Partido Político MIRA, Manuel Virgüez, denunció que a través de al menos tres modalidades, el Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito (SOAT), se ha convertido en una forma de desfalcar la salud en el País.
La primera de ellas tiene que ver con accidentes diversos como por ejemplo, una caída en escaleras, de un caballo, o accidentes domésticos, que nada tienen que ver con la materia, pero que se facturan como si fueran siniestros de tránsito, generándose una alteración en las estadísticas de mortalidad y morbilidad.
La segunda consiste en que se simula un accidente que nunca ocurrió, hay una persona a la cual le “compran el Soat”, este individuo aporta copia de la póliza de Soat, copia de la denuncia (Esto para evitar aportar el croquis del informe policial; cuando, el policía de tránsito, no está involucrado en el fraude, hay una o varias personas que “compran el Soat”, hay una o varias personas en las IPS que permiten el fraude para ser cobradas. Se utiliza el Soat de un automóvil para simular un accidente donde fueron involucrados dos conductores.
La otra irregularidad que denunció Virgüez, es la alteración de medicamentos, es decir que se suministra medicina genérica y se factura como si fuera original, lo que eleva los costos. La diferencia en precio entre un medicamento genérico frente a un medicamento original o de marca puede oscilar en un cuarenta por ciento.
De acuerdo a estadísticas del Instituto Nacional de Investigación y Prevención del Fraude, en el 2003, el 15 por ciento de los siniestros que pagaron las aseguradoras, eran fraudes, en el año 2010, este número se incrementó al treinta por ciento. Es decir, que las cifras de accidentalidad pueden estar falseadas en por lo menos un treinta por ciento.