En el recinto de la Asamblea departamental, convocado por la diputada María Mercedes Rojas, se llevó a cabo el primer encuentro de autoridades competentes, migrantes, retornados y sus familiares, en el primer foro “Los efectos de la migración”, para analizar la situación de nuestros compatriotas en otros países y la de los que regresan a su tierra, en muchas ocasiones sin posibilidades económicas ni laborales.
A la reunión asistieron James Castaño, Secretario Departamental de Familia; Ricardo Emilio Muñoz Arbeláez, Director de Poblaciones de la Secretaría de Familia de la Gobernación del Quindío; Sandro Garay Durán, de Migración Colombia; Álvaro Romero, de la Asociación de Migrantes Retornados del Quindío; Julián Mauricio Jara, Secretario del interior y Ana María Arroyave, Secretaria Administrativa de la Oficina de Pasaportes.
La representante Ana Paola Agudelo inició su exposición dando públicas felicitaciones al departamento del Quindío, en cabeza de las organizaciones que están atendiendo a los retornados, acciones que en otras regiones no se realizan. También se manifestó complacida con las exposiciones de los participantes mencionados.
Las cifras, aunque no actualizadas porque el Estado no logra tener un registro de la actividad migratoria, son preocupantes: más de cinco millones de nacionales en otras latitudes; quinientos mil por causa del conflicto armado, 14 mil hombres y mujeres privados de la libertad en países extraños y un movimiento financiero casi tan importante como las divisas generadas por el petróleo y el carbón: 4 mil millones de dólares anuales, casi 10 billones de pesos colombianos, es lo que ingresa al país, enviado por los connacionales que viven en el extranjero.
Aun así, el gobierno quiere eliminar una de las dos curules que representan a los colombianos en el exterior, con un proyecto de ley que ya hace curso en el Senado. Si promediamos la población colombiana por el número de representantes en la Cámara, hablaríamos de un representante por cada 300 mil habitantes aproximadamente y, con el proyecto del gobierno, los 5 millones que viven en el extranjero tendrían solo un representante.
Las conclusiones del foro, relacionadas al final por la congresista Agudelo García, se enfocan en que este es un tema de derechos humanos y como tal debe ser tratado; que la política pública debe verlos como personas, como seres humanos y no como cifras o simples estadísticas y, para el caso de migrantes y retornados, debe dárseles el estatus de población vulnerable.
También es de gran importancia replicar en las administraciones municipales y departamentales, el logro del Partido Político MIRA de incluirlos en el Plan Nacional de Desarrollo para que se implementen políticas de atención a los migrantes en los planes de desarrollo locales.
Otro tema que se lleva la congresista, es el de la repatriación de cadáveres para ponerlo en marcha en otros departamentos, ya que el único que lo maneja organizadamente con recursos, es el Quindío. Propondrá un fondo para este tipo de repatriación.
Las rutas de información que se mueven en este departamento, están bien cimentadas ya que las redes sociales permanecen muy activas con el tema de la migración, dijo la representante.
Finalmente, sugiere un ingente esfuerzo por articular entidades del gobierno en beneficio de esta población y recomienda que se siga haciendo lo ya desarrollado en el Quindío, fortaleciéndolo cada vez más. Propone, además, realizar otras reuniones que den continuidad al tema tratado en este foro culminado con éxito en su periplo por el Eje Cafetero.
Experiencias y reclamos de los retornados, de los familiares de los migrantes, informes de las diferentes instituciones relacionadas con el tema, son los insumos que se lleva la congresista para continuar su labor en la Comisión Segunda de Cámara y desde allí mejorar las condiciones tanto de los ausentes como la de los que retornan.