Comunicado General del Partido Político MIRA a afiliados, simpatizantes y opinión pública

Como es de público conocimiento hace algunos días, gracias a una Acción de Tutela interpuesta por nosotros, el Consejo Superior de la Judicatura le ordenó al Consejo Nacional Electoral que reabriera 13.745 mesas de votación por todo Colombia, para preservar la Verdad Electoral de las elecciones al Senado.

Esa decisión judicial consideró fundamentalmente dos cosas. En primer lugar, que sigue siendo constitucional pedir el recuento de los votos, cuando un partido político compara sus votaciones en la mesa para diferentes corporaciones, y halla entre ellas una diferencia mayor al 10%.

Históricamente, nuestras votaciones para el Senado de la República, comparadas con la Cámara de Representantes, han sido prácticamente las mismas. En esta elección, extrañamente, se presentó una diferencia cercana al 25% entre ambas, lo que representa un extravío cercano a 90.000 votos de MIRA.

En las comisiones escrutadoras instaladas el mismo día de elecciones, ignoraron sistemáticamente las solicitudes que hicimos sobre esto, con lo cual, fueron menoscabados nuestros Derechos Fundamentales a Elegir y ser Elegido, y la Verdad Electoral.

La segunda consideración, fue respecto del marcador de agua que suministró la Registraduría para que los ciudadanos marcaran su voto. Como no se secaba instantáneamente, luego de marcar la casilla de MIRA para Senado y doblar el tarjetón para depositarlo en las urnas, se producía una marca reflejo sobre el voto en blanco.

En decenas de miles de casos, erróneamente, los jurados de mesa interpretaron esta situación como votos nulos. En la Tutela se probó plenamente esta situación irregular, que fue reconocida, inclusive, por la misma Registraduría.

Entonces, por esas dos razones, se ordenó en la Tutela el recuento de los tarjetones, para establecer la votación real a favor del Partido Político MIRA.

Sin embargo, tanto el Consejo Nacional Electoral, como la Registraduría Nacional del Estado Civil, han ignorado todas las razones por las cuales el Consejo Superior de la Judicatura llegó a esta decisión histórica para nuestra Democracia.

En la inmensa mayoría de casos, por todo el territorio nacional, se han limitado sólo a recontar los votos que los jurados habían clasificado inicialmente a favor de MIRA, sin revisar los votos en blanco, los nulos y las tarjetas no marcadas.

Por otra parte, se ha impedido el acceso de observadores del Partido Político MIRA y de otros partidos; la Procuraduría ha tenido una escasa presencia en el proceso; no se han corregido los documentos electorales cuando se encuentran inconsistencias; tampoco se ha evaluado la totalidad de las mesas, conforme lo ordenó la sentencia de Tutela.

Además de ello, sabemos que algunos de los líderes del Movimiento han sido amenazados por intentar defender los derechos fundamentales que se ven comprometidos en este proceso.

Y como si lo anterior fuera poco, encontramos que han desaparecido, literalmente, los votos en varias regiones del país. Los casos se han presentado, hasta ahora, en Cundinamarca, Magdalena, Córdoba y Cesar. Inclusive, ni Bogotá ha escapado a esta modalidad de Fraude Electoral, pues no encuentran el material electoral de 273 mesas. Hemos contabilizado la pérdida de 131.815 votos por toda Colombia.

Entonces, si bien es cierto que el fallo de Tutela que quiso amparar nuestros derechos fue una decisión de avanzada, y no tiene precedentes en el ordenamiento jurídico, la realidad enseña, abruptamente, que no hay garantías para seguir intentándolo por este camino.

La Organización Electoral insiste en su posición, y en ese proceder obstinado, es imposible que se dé algún cambio. Lamentablemente, no habrá claridad respecto de la Verdad Electoral en los comicios del 9 de marzo.

En consecuencia, el paso a seguir será nuestra demanda ante el Contencioso Administrativo, esperando que el Consejo de Estado observe todas las irregularidades que se presentaron, y pronunciándose en derecho, anule la elección del Senado, y decrete su verdadera composición.

También, afianzamos nuestro compromiso con todo el país, pues por oscuro que se muestre el panorama, a causa de tantos sucesos que causan insatisfacción e impotencia, es menester que sigamos trabajando por los ideales democráticos que hemos defendido, y demostrado hasta la saciedad, en estos 14 años de existencia.

Entre todos, hemos conservado la Personería Jurídica del Partido Político MIRA, y contamos con 3 valiosos Representantes a la Cámara que, sin el menor asomo de duda, continuarán el trabajo de la colectividad desde el Congreso.

Claro, habrá cambios, novedades y cosas mejores que vendrán, y sin dudarlo, estaremos ahí para hacer oír la voz de quienes, sean cuales fueren las circunstancias, necesitan ser escuchados.

Tenemos vocación de poder, y nuestras aspiraciones de resignificar el ejercicio político, con valores y dignidad, continúan intactas.

Vienen las elecciones locales de 2015. Así como hoy contamos con presencia en Concejos, Asambleas y en el Ejecutivo Municipal y Departamental por todo el país, veremos ampliada esa representación desde octubre del próximo año, cuando sean elegidos nuevos líderes y lideresas avalados por nosotros en Colombia.

Ya posesionados desde enero de 2016, allanaremos entre todos el camino para regresar fortalecidos al Poder Legislativo en las próximas batallas electorales de 2018, al margen de lo que las futuras decisiones judiciales puedan fallar a nuestro favor, que es a favor de la Verdad, y de la Democracia.

En suma, quedamos más fuertes, robustecidos y afirmados luego de estas experiencias.

Continuaremos en estos escenarios, más vigentes que nunca, consolidándonos como líderes de opinión, porque no nos cabe duda que la Política, sin el Partido Político MIRA, estaría incompleta.

De todos Ustedes, sinceramente:

CARLOS ALBERTO BAENA LÓPEZ
Presidente del Partido Político MIRA