Quiero presentarles a DIOSELINA CARACAS, la mujer de mayor edad en Cali, y tal vez de Colombia, el 4 de marzo le celebramos su cumpleaños número 106, totalmente lúcida, y aún lee sin gafas. Una mujer guerrera, que con tesón, mucho amor, y fabricando dulce de manjar blanco, herencia de sus ancestros, crió sola a sus hijos y los hizo hombres y mujeres de bien para la sociedad, en ella veo reflejadas a todas las mujeres colombianas.
FELIZ DÍA MUJER
El mundo ha escogido para resaltar la labor y la importancia de la mujer en la sociedad a este mes, y a un día de este mes en especial, el 8 de marzo; ya sea esta mujer niña, joven, adulta, rural o urbana, casada o en unión marital o cabeza de familia o que viva sola, afro, indígena, blanca o mestiza, es decir día de todas las mujeres.
Muchas de estas mujeres individualmente o a través de organizaciones vienen trabajando para alcanzar el goce efectivo de sus derechos, son en muchos casos personas anónimas, pero cuya labor es supremamente importante para lograr la equidad. Son guerreras, que con tenacidad, muchas sin recursos, con las uñas, luchan por que el comportamiento colectivo, las leyes y políticas públicas se conviertan en una realidad en su favor.
La mujer espera que la violencia contra ellas desaparezca o por lo menos se reduzca; para ello es necesario que el Estado, la sociedad y la familia magnifiquen las campañas del respeto a los derechos de todas ellas.
Que paradójico resulta que en pleno Siglo XXI, cuando está plenamente reconocido que la especie humana la conforman hombres y mujeres, a la mujer no le sean reconocidos en la práctica muchos de los derechos de que deben gozar todos los conformantes de esta, máxime que sobre ella recae gran parte de la carga biológica de la reproducción de la especie, y gran parte de la carga social y afectiva de la crianza de la misma.
La vivienda, la salud, la educación y el empleo para la mujer, deben ser objeto de especial preocupación por parte de los gobernantes a todo nivel, y mejorar en los indicadores socioeconómicos para ellas, meta de toda la sociedad, pues está probado que una mejoría en la situación de la mujer implica una mejoría de todo su entorno familiar.
Insto a toda la sociedad, a los mandatarios de Colombia y del Valle del Cauca, desde el Presidente a la cabeza, a la Gobernadora, y a todos los mandatarios municipales, a que multipliquemos esfuerzos, para que en nuestro patria, departamentos y municipios se inicie una verdadera revolución pacífica en pro de la equidad, de la inclusión y de la verdadera participación de la mujer. Ya no más un día en especial, ya nos más una rosa en un día y espinas el resto del año. Solo así podemos llegar a ser una sociedad en paz, digna de estar en el concierto de naciones civilizadas, y que sea válido decir FELIZ DIA MUJER.